Para llevar a cabo el desarrollo de un proyecto de energías renovables es necesario realizar la prospección del mismo, así como la obtención de permisos, autorizaciones y licencias que permitan legalizar y dar viabilidad técnica, jurídica y económica al proyecto en cuestión. Es decir, un proyecto en desarrollo pasará por distintas fases hasta su consecución.
Para entender en qué consiste el desarrollo vamos a analizar las diferentes fases de preparación para acometer un proyecto de energías renovables:
1.Estudio del proyecto.
El desarrollo de un proyecto de energías renovables comienza con el estudio y el análisis de su viabilidad técnica y financiera. En primer lugar, se identifican mercados estratégicos para ofrecer oportunidades de inversión atractivas.
Es de suma importancia la estabilidad del marco jurídico en el sector energético del país donde se va a desarrollar cada proyecto, para tener claridad tanto en la obtención de permisos como en los procedimientos de venta de energía.
Una vez se haya identificado una oportunidad de desarrollo de proyectos renovables, se estudiará su ubicación y se analizará la disponibilidad de recursos naturales de la zona, como pueden ser la radiación solar, la velocidad, frecuencia y dirección del viento, o el acceso a suficiente combustible para establecer una planta de biomasa. En esta fase se evalúan los recursos energéticos disponibles y las posibilidades de éxito en el posterior desarrollo.
2.Obtención de permisos y licencias.
Una vez observados los recursos de los que se dispone, hay que centrarse en el diseño técnico para obtener los permisos, licencias y autorizaciones necesarias para operar en las plantas. Es en este punto donde se empezarán a tramitar todos estos permisos y se realizará un seguimiento para su obtención.
Aquí encontramos múltiples procedimientos y trámites. Las competencias para expedir licencias y permisos se reparten entre el Estado, las Comunidades Autónomas y las entidades locales como los Ayuntamientos.
Destacamos que el procedimiento de todo el desarrollo y de los plazos de tiempo varía en función de la tecnología y del país en el que desarrollamos el proyecto. En los proyectos fotovoltaicos uno de los primeros pasos es solicitar el Punto de Acceso o Conexión a la compañía eléctrica y para la eólica es realizar mediciones de viento, como mínimo durante un año.
Podemos decir que esta fase, en un proyecto fotovoltaico en España, finaliza con la inscripción del proyecto en el Registro de Pre-asignación de Retribución del Régimen Especial. Posteriormente, una vez ejecutada la obra, se deberá seguir con la tramitación, terminando con la inscripción definitiva en el registro de instalaciones en régimen especial, junto con otros permisos vinculados a la ejecución de la instalación.
Se crean las estructuras apropiadas para llevar a cabo los proyectos de energías renovables y se incorporan las SPVs (Special Purpose Vehicle) necesarias, sobre las que se realiza la Due Diligence.
La Due Diligence es un proceso que busca obtener información para valorar y fijar de un modo objetivo el precio final de una operación de adquisición de empresas y la exigencia de garantías.
En este caso, hablamos de una Auditoría Externa de todos los aspectos vinculados al proyecto. Se van a analizar y evaluar las características del proyecto, tanto técnico (estudio de proyecto técnico, análisis de EPC y contratos O&M, evaluación de los componentes, análisis de producción, rendimiento y disponibilidad, etc.), como jurídico y financiero (estudio de la estructura legal y fiscal, análisis de los activos y pasivos, nuevo cálculo de ingresos, etc.).
La Due Diligence valora los riesgos del proyecto en todos sus aspectos y, en algunos casos, se proponen medidas para mitigarlos o eliminarlos.
3.Construcción del proyecto.
Después de definir el diseño del proyecto se pasará a una fase de construcción. Esta consiste en la construcción e instalación de la propia planta, comprendiendo toda la obra civil para acondicionar el terreno y hacer las canalizaciones, obra civil de la interconexión de la planta con las redes eléctricas de distribución o transporte, llevar a cabo el resto de la obra civil necesaria, y la recepción y montaje de todos los equipos. Una vez se finalizan todos estos trabajos, se certifica que la planta ha sido ejecutada conforme a lo previsto. En caso contrario, se deben justificar y documentar las modificaciones.
Una modalidad de contratación muy empleada en el desarrollo y ejecución de proyectos es el contrato EPC (Engineering, Procurement and Construction), conocido como “llave en mano”. Esta modalidad consiste en un único interlocutor que suministra de forma completa la instalación lista para ser operada, asumiendo tareas como el diseño, la compra y suministro de equipos y la construcción.
En general, los contratos de EPC están asociados a contratos de operación y mantenimiento (O&M). Esto le asegura al inversor el correcto funcionamiento de la planta durante la vida útil de la misma.
Desarrollo Proyectos energías renovables (Progressum)
Development Renewable energy projects (Progressum)
EPC Proyectos energías renovables (Bester)
EPC Renewable energy projects (Bester)
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